8 maneras de prevenir trastornos alimenticios
2. Aprenda todo lo que pueda sobre la anorexia, la bulimia y otros tipos de trastornos alimentarios. La conciencia genuina le ayudará a evitar actitudes críticas o erróneas sobre la comida, el peso, la forma del cuerpo y los trastornos de la alimentación.
3. Tome la decisión de desafiar las ideas falsas de que la delgadez y la pérdida de peso son excelentes, y que la grasa corporal y el aumento de peso son horribles o indican pereza, inutilidad o inmoralidad.
4. Evite categorizar los alimentos como "bueno / seguro" contra "malo / peligroso". Recuerde que todos necesitamos comer una variedad equilibrada de alimentos.
5. Deje de juzgar a los demás y a usted mismo en función del peso o la forma del cuerpo. Apague las voces en su cabeza que le dicen que el peso corporal de una persona es un indicador de su carácter, personalidad o valor como persona.
6. Conviértase en un espectador crítico de los medios y sus mensajes sobre la autoestima y la imagen corporal. No acepte que las imágenes que ve son ideales que debe intentar alcanzar. Cuando escuche un comentario de ver una imagen que promueve la delgadez a toda costa en televisión, hable con las autoridades del canal. Si ve un anuncio de una revista o un artículo que lo hace sentir mal acerca de la forma o el tamaño de su cuerpo, escríbale al editor al respecto.
7. Elija valorarse a usted mismo en función de sus objetivos, logros, talentos y carácter. Evite que la forma en que se siente sobre su peso y la forma de su cuerpo determine el curso de su día. Celebre la forma y el tamaño único de su cuerpo y abrace la diversidad natural de los cuerpos humanos.
8. Finalmente, si cree que alguien tiene un trastorno de la alimentación, exprese sus preocupaciones de manera franca y atenta. Suave pero firmemente aliente a la persona a buscar ayuda profesional. Si tiene un trastorno alimentario, no permita que controle su vida por más tiempo. Llame a un centro de rehabilitación de trastornos alimentarios y descubra cómo un programa de tratamiento residencial puede ayudarle a recuperar el control de su vida.
Recuerde que los trastornos alimenticios son más que solo una enfermedad física; las causas de raíz a menudo son causadas por desequilibrios mentales, emocionales y espirituales, por lo que psicólogos y psiquiatras profesionales pueden ayudar a cambiar su situación o la de sus seres queridos que están sufriendo problemas alimenticios.