¿Notas que tu piel está más seca de lo normal?, ¿sientes picor y tirantez en tu rostro? Estos son algunos de los síntomas que produce la sequedad de la piel y debes saber que tiene fácil solución. Pese a que es un problema muy común y que afecta a muchas mujeres, en ocasiones, pasa desapercibido, ya que no le damos la importancia que se merece.
Qué hacer para combatir la sequedad del rostro
Debes seguir una rutina a la hora de cuidar tu piel, sobre todo, tu rostro:
Debes aplicar una crema hidratante cada mañana. La cantidad del producto debe de ser abundante.
No debes usar jabón ni mascarillas que contengan alcohol.
Evitar a toda costa los productos exfoliantes. Utiliza los cosméticos ricos en vaselina.
Asegúrate de limpiar tu rostro antes de maquillarte y cuando retires la pintura. Utiliza para ello una crema y un tónico que no contenga alcohol.
Protege tu piel ante los rayos del sol.
Nunca salgas con la cara húmeda a la calle, el viento es muy perjudicial para las pieles secas.
También es muy importante tu alimentación, acuérdate del dicho de "somos lo que comemos". En el caso de las mujeres que padecen sequedad es conveniente que lleven una dieta rica en vitaminas, y además, deben evitar hábitos no saludables como el tabaco o el alcohol.
Mascarillas caseras para combatir la sequedad del rostro
Si quieres combatir la sequedad de tu rostro de una forma fácil y rápida, estas recetas de Mascarillas caseras para combatir la sequedad del rostro te ayudarán a conseguirlo. Toma nota y empieza ya a hidratarte, tu piel te lo está pidiendo a gritos.
Mascarilla de huevo
Bate tres cucharadas de nata líquida hasta que espese.
Mézclala con una yema de huevo y unas gotas de zumo de limón hasta obtener una crema.
Extiéndela por la cara y el cuello y deja que actúe durante 20 minutos.
Aclara después con agua tibia.
Mascarilla de plátano
Tritura un plátano maduro y agrega un poco de yogurt o de miel.
Aplica la mezcla como si se tratara de una mascarilla.
Aclara después con agua tibia.
Mascarilla de aceite
Mezcla 1 cucharadita de miel, 1 cucharadita de harina, 1 cucharadita de aceite de oliva y 1 yema de huevo.
Aplica la mezcla en la cara y el cuello y dejar actuar durante 30 minutos.
Luego, retírala con agua tibia.