Ya sea que quieras escribir relatos eróticos para Internet o bien para ser publicados como libro, hay algunos consejos a la hora de escribir este tipo de historias que son muy importantes a tener en cuenta. Aquí explicitamos 5 Consejos para escribir relatos eróticos de la mejor manera y ganar la atención de los lectores y de los editores. Siempre es bueno saber que hay páginas web en las cuales también puedes leer este tipo de historias; en nuestro caso te invitamos a conocer Esposas y Maridos, que cuenta con una sección de relatos XXX excelente.
Consejos para escribir relatos eróticos
Comienzo, desarrollo y final
Si bien toda historia necesita un comienzo, una parte media y un final, todo lo que sucede en cada escena (o capítulo) no lo necesita. Un personaje no necesita entrar en una sala, participar en una conversación o una serie de acciones y diálogos, abandonar la sala, reflexionar sobre lo que se dijo mientras se prepara para ir a la cama y quedarse dormido. Comienza la escena o el capítulo lo más cerca posible al punto en que está allí para transmitirlo y finalízalo tan pronto como sea posible después de la información que deseas que el lector haya recibido. Esto es doblemente importante a la hora de escribir relatos eróticos. Cada encuentro erótico no tiene que comenzar con los juegos previos y terminar con el orgasmo. Sé honesto.
La importancia de los detalles
Haz que los detalles cuenten. Algunas escenas bien escritas tienen una rica gama de detalles bien pensados, y otras escenas bien escritas se desarrollan en un estilo más escueto o más impresionista. Si estás haciendo lo primero, asegúrate de que la voz narrativa guíe claramente al lector, de modo que la exuberancia apunte hacia algún lugar concreto en vez de convertirse en una jungla en la cual atascarse. Si es lo último, asegúrate de que esos pocos detalles tengan un peso importante en términos de su eficacia. Con cualquiera de los enfoques (o cualquier cosa en el medio), ten cuidado con los detalles que son como "malas hierbas" y que pueden distraer de los detalles "flores".
Apaga tu censura interior y escribe sucio
No puedes escribir sobre sexo con una proyección de tu madre, padre, abuelo, tío, sacerdote o maestro sentado en tu hombro expresando conmoción o indignación moral en cada oración. Si tienes hijos pequeños o un trabajo delicado, es probable que debas elegir un seudónimo y cuidarlo fuertemente. Entonces puedes darte permiso para escribir libremente, sin restricciones, sin inhibiciones. Sin que nadie te susurre que no es arte, que es algo barato y sucio o que está mal.
Escribe sucio. Quiero decir muy sucio. Piensa en un acto sexual que, personalmente, te parezca chocante, extraño o incluso desagradable. Luego escribe una escena corta incorporando ese acto. Y no de una manera chocante, extraña, desagradable o repugnante. De una manera que sea caliente y positiva y te deje con esa pequeña sensación apretada en la garganta. Incluso si nunca le muestras esto a otra alma, es útil sacar lo peor de tu sistema en lugar de ir de puntillas hacia cosas cada vez más arriesgadas y también aprender a transformar cualquier cosa en algo sexy, incluso si está totalmente fuera de lugar. Tu propia experiencia o fantasías más oscuras deben salir a la luz. Otro ejercicio útil es hacer que algo realmente mundano suene atractivo. Como la simple acción de tejer, por ejemplo.
Editar, editar, editar
Respetar al lector significa trabajar mucho en la edición. Si vas a escribir un relato erótico y quieres que quien lo lea y se entretenga con él, ¡no lo hagas a medias! Hazlo lo mejor que puedas. Y parte de cómo lo haces es a través de la edición. Y la edición. Y la edición de nuevo.
Se trata del respeto por el lector. Como lectores, una cosa es leer algo que no guste, pero si además está mal editado, no solo no gusta, sino que da la sensación que ni siquiera al escritor le importa el relato.
Es normal tener algunos errores, los cuales seguramente se corregirán cuando los editores o lectores lo revisen, pero cuantos más errores atrapes, menos habrá para más tarde, lo que significa que habrá una mayor posibilidad de que lo que salga sea perfecto, o tan cerca como puedas conseguirlo.
No te compares con otros autores
Es fácil desanimarse acerca de la propia carrera de escritor erótico cuando lees otros autores que parecen ser más prolíficos, más populares, más conocedores de marketing, más elocuentes, más originales, o lo que sea. Cuando esas comparaciones empiezan a perseguirte, intenta ignorarlas. Recuerda que cada uno de nosotros tiene su propia voz, su propio método, su propio camino hacia el éxito. Emociones negativas como la envidia, la culpa o un sentimiento de insuficiencia no te motivarán a producir relatos eróticos de calidad. La negatividad tiende a sofocar la inspiración.